Idea y las dos caras de un coloquio que dejará secuelas

“Pobre Constantini, habría querido tener un Coloquio más tranquilo”, dijo un empresario partícipe de las jornadas en Mar del Plata. Se refería a la presidenta de la reunión, que juntó a las 700 principales firmas que operan en el país. Hace unos meses atrás, Isela Constantini (Ceo de General Motors) consensuó con las mesa chica de empresarios organizadores que “querían un Coloquio que no mirara la coyuntura sino políticas de mediano y largo plazo”, para evitar confrontar directo con el gobierno nacional.¿Subestimaron, acaso, que

la campaña política ya se adelantó en el país, y que con solo invitar a los candidatos presidenciales, el encuentro se teñiría de bloque opositor, ya que el kirchnerismo puro nunca asiste?. Scioli lo hizo, mostrando apertura, pero se retiró decepcionado y haciendo pública su bronca.

El constitucionalista Daniel Sabsay dio el toque final. “Nos sorprendió. Parecía poseído por Lilita Carrió”, agregó otro recién llegado del Coloquio que asiste frecuentemente a charlas del prestigioso panelista. Comenzó su disertación como siempre, haciendo gala de su saber técnico jurídico y al minuto y medio, subiendo la voz, salpicó a la presidenta poniendo en duda que fuera abogada.

La temperatura que adquirió el cierre de la reunión empresaria fue una divisoria de aguas entre quienes como Constantini hubieran preferido otro tipo de Coloquio y los que por dentro sonrieron, ya que -piensan- “era hora de ponerse de la vereda de Juan José Aranguren, Ceo de Shell y primero en enfrentar al kirchnerismo. La gran pregunta es : ¿como harán para enfrentar a Kicillof , los que viven de al relación con el estado, en lo que resta de gobierno?