¿Cuánto saldrá la reconstrucción y quién le dará un Plan Marshall a la Argentina?

De lo que todavía no se habla mientras se salvan vidas con la Salud como agenda prioritaria.

El plan Marshall fue creado por los Estados Unidos en la posguerra y tuvo tres objetivos claros: evitar la insolvencia europea, impedir la expansión del comunismo y crear una estructura económica que beneficiara la formación de regímenes democráticos.

EE.UU. tenía por esos años el control hegemónico de la economía. La pandemia actual golpea por igual a otras potencias y los recursos deberán aplicarlos primero a rescatar a los norteamericanos. China podría ser el nuevo enemigo de las democracias occidentales, a la cual ya le ponen el cartel de “culpable” por haber sido el territorio de origen del Covid 19.

Cuando Argentina aún no sabe cómo desandará el camino del mega empréstito, tomado por la gestión Macri con el FMI, Alberto salió a plantear la idea de un “nuevo plan Marshall” de rescate a las economías emergentes.

El asunto quedó como una magnánima expresión de deseos, algo similar al Papa reclamando un salario universal para los desplazados de la economía formal.

El presidente espera no tener que contar un tendal de muertos como ocurre en EEUU y en países europeos. A contracara, diversos sectores productivos le advierten no descuidar la consecuencias dramáticas de la economía.

Su respuesta ya en una frase de cabecera: Prefiero tener el 10% más de pobres y no 100 mil muertos en la Argentina”

Estados Unidos aportó en 1948 más de 20.000.000 de dólares. Es muy dificil cuantificar para los organismos de mediciones económicas mundiales a cuánto llegará la ruina y las pérdidas de fuentes laborales en las condiciones actuales. Si se proyecta que el Coronavirus producirá más millones de pobres. De los 67,5 millones actuales a 82 millones de pobres, aproximadamente.

Se sabe que en América Latina las consecuencias de la crisis económica, post cuarentena, pegará más fuerte. La Cepal prevé un golpe múltiple para la región, a través de la disminución de la actividad económica en sus principales socios (Estados Unidos, Europa y China), abaratamiento de las materias primas, interrupción de las cadenas mundiales de valor, menor actividad turística, entre otros guarismos.

Para tomar real dimensión, un informe del FMI trazó una temeraria comparación: dijo que el golpe económico sería más grave que el crak financiero de 1929.

El Banco Mundial hizo precio al la perspectiva de caída del PBI argentino en 5,2%, cuando informes privados locales hablan de una caída al menos del 8%. El último trilenio se emaprentaría con el del 2001/03 que la economía se desplomón en un 15 %.

La maquinita de imprimir billetes del Central ya esta en una base monetaria , en el primer tirimestre, análoga a la de toda la emisión monetaria del 2019. A Pesce le piden más subordinación y valor.

Antes de la tormenta perfecta, hay cuestiones urgentes a resolver. Las Pymes no saben cómo pagarán los sueldos de mayo. CAME calcula que las economías regionales dejaron de recaudar por la cuerentena en Semana Santa, unos 14.800 millones de pesos.

La maquinita de imprimir billetes del Central ya está en una base monetaria, en el primer tirimestre, análoga a la de toda la emisión monetaria del 2019. A Pesce le piden más subordinación y valor.

En medio de la sequía, Alberto fue contundente al definir que el Estado deberá buscar nuevos recursos impositivos. La maquinaria k apunta a un impuesto a la riqueza. Según borradores se espera recaudar 1050 millones de dólares que aplicarían a fortunas personales y no a empresas.

El impuestazo a los ricos no es algo que enamore al presidente, pero sabe que al presión de su base de sustentación electoral será muy fuerte y que además necesita sacar recursos de donde sea para campear la crisis.

Definir quiénes son ricos y quiénes no tanto será muy importante. La clase media ya está curada de espanto por la succión impositiva.