El contagio de Vidal desnudó una reunión con Larreta que Macri no estaba notificado

La cadena de posibles contagios trasunta otra historia de internista dentro de Juntos por el Cambio. Quiénes y por qué se reunieron.

María Eugenia Vidal dudó, por un momento, cómo y cuándo comunicar su positivo de Covid-19. Sus dudas nunca pasaron por la responsabilidad pública y entendió que sería peor que se dijera por otras voces. El problema está en las reuniones secretas que mantuvo a las espaldas de Macri. Sobre todo una.

A primera vista se dibujó el eslabón de contagio con el diputado Alex Campbell, principal espada política de la ex gobernadora en la Legislatura bonaerense. Es cierto que el diputado tuvo el contagio seguramente por sus contactos con Martín Insaurralde. Todos estos enlaces son motivo del relato periodístico y el análisis infectológico en la búsqueda del caso cero.

A Juntos por el Cambio le inquietó la otra reunión. La que se produjo a manera de almuerzo secreto, el jueves pasado, y donde comieron Vidal, Larreta, Monzó y Lousteau. El almuerzo se hizo en la casa de un funcionario porteño que cedió uno de sus amplios ambientes,

A Juntos por el Cambio le inquietó la otra reunión. La que se produjo a manera de almuerzo secreto, el jueves pasado, y donde comieron Vidal, Larreta, Monzó y Losuteau. El almuerzo se hizo en la casa de un funcionario porteño que cedió uno de sus amplios ambientes,

 

El motivo de la reunión secreta tiene la dificultad presente de encontrar diversas excusas ante las preguntas que surgen en la quinta Los Abrojos. De hecho se bajó a último momento de la misma, Rogelio Frigerio, que nunca estuvo de acuerdo sobre el secretismo de las misma.

Larreta convenció primero a Maria Eugenia de ir preparando un terreno pos pandémico distante del paladar más agresivo del macrismo.

Sumaron a Lousteau por ser el referente del dialoguismo en el Senado con Alberto. El invitado que más volumen le dio al cónclave fue Emilio Monzó, quien es siempre un vector de llegada al peronismo y el Jefe de gobierno lo ve como candidato a gobernador en el 2023.

Por otro lado, Larreta intentó amigar a Vidal con Monzó. No se veían de hace por lo menos un año. la ex gobernadora lo borró de todas sus mesas políticas. Nunca confiaron entre ellos. La inquina se remonta a antes que Vidal se encaminará a ganarle a Aníbal Fernández. Monzó quería acordar con Massa y sumarlo al anti kirchnerismo.

Tras el impacto de contagios del Covid en la política también se redescubren otras roscas. El Zoom no es seguro para las conversaciones importantes, por las sospechas del espionaje. No debe dejarse de lado en el análisis que si bien declararon principio de inocencia en el ingeniero, jugador de Bridge, los espiados del PRO se presentaron como querellantes,