El nuevo fenómeno Vidal, no solo ganó por la “traición” de algunos peronistas

Aníbal Fernández habló de fuego amigo. Todos supieron que se refería a Julián Dominguez y a Randazzo. En un off ante un par de periodistas no se guardó nada: “El flaco es un HDP”. La supuesta traición no alcanza a explicar el nuevo fenómeno.

La gobernadora electa sacó casi 500 mil votos más que Macri y hasta superó a Scioli. Histórico. Esa es la palabra que resume el triunfo de María Eugenia Vidal en la provincia de Buenos Aires. Por primera vez, y tras casi 30 años de peronismo, una mujer gobernará el distrito más grande del país.

Vidal incluso superó a Daniel Scioli, en provincia, ya  que éste tuvo unos 50 mil sufragios menos. A la hora de analizar este fenómeno se hace hincapié en reconocerle a la ahora gobernadora electa  una campaña muy intensa, cara a cara con la gente, en el Conurbano profundo. Mientras que Scioli estaba en los sets de TV, la mujer de la sonrisa cristalina tocaba timbre y atendía las necesidades de los que están hartos de ser usados para actos políticos.

Además, 500 mil personas que habían votado en blanco en las Paso tuvieron una opción en esta primera vuelta y votó un 80 % del padrón, un 25 % más que en la interna abierta.

Otra de las claves de la elección fue el rol de los intendentes. Tal como dijo Aníbal, los jefes comunales jugaron para sí mismos y repartieron la boleta ya directamente cortada para intentar no pegarse a la mala imagen del jefe de Gabinete. De igual manera, a muchos de ellos no le sirvió la estrategia ya que fueron muchos los barones del conurbano que cayeron por primera vez en años.

Por último, el batacazo de Vidal se explica en el interior productivo de la Provincia: Vidal contó con un fuerte apoyo del campo y perdió solamente en menos de ocho municipios. Parecía imposible, pero la misma que llamaron ‘Heidi’ selló un triunfo para los libros.