Exclusivo: Sciolistas y opositores cenaron y discutieron cómo mejorar la relación con EE.UU.

El viernes a la noche hubo una cumbre de dirigentes políticos de todas las facciones con empresarios y un solo propósito: cómo mejorar la relación con los Estados Unidos. ¿De qué se trató?

El anfitrión en la casa de las Lomas de San Isidro fue el diputado del Frente Renovador José De Mendiguren, que representó la pata massista del encuentro. Del PRO participaron las diputadas Patricia Bullrich y Laura Alonso, mientras que del oficialismo fue Gustavo Marangoni, presidente del Banco Provincia. Vino, champagne y gaseosas decoraron una mesa en la que se sirvió asado hecho por un catering privado.

Se vivió un ambiente muy relajado en el que igual hubo tiempo para pequeñas chicanas de unos a otros. Todos hablaron con la certeza de que su espacio va a ser gobierno el año próximo. Patricia Bullich fue un poco más allá y en un pasaje de la charla en la que se habló sobre los medios, entre risas, le preguntó a Marangoni: “¿Tiempo Argentino sigue el año que viene?”. “Quedate tranquila que sí”, respondió el sciolista.

Acompañados por algunos empresarios, el encuentro fue en el contexto de varias reuniones que mantuvieron los representantes de los tres principales espacios políticos para hablar sobre la relación con Estados Unidos a partir del 11 de diciembre, gane quien gane. Incluso ya hubo un viaje a Washington, a principios de junio, financiado por la Cámara de Comercio de los Estados Unidos en la Argentina (AmCham) y la Fundación Centro de Estudios Americanos.

En aquella oportunidad, se entrevistaron con la diplomacia norteamericana y el establishment de Washington, donde acordaron una inminente recomposición de lazos. En los planes hay un nuevo viaje a Estados Unidos, aunque todavía no tiene fecha clara. Lo que sí está claro es que en pocos meses, el país norteamericano logró lo impensado: unir a oficialistas y opositores.