Qué dice la denuncia contra los periodistas de El Destape, acusados de revelar nombres de espías

La presentación tuvo amplio repudio en las redes porque involucra a los periodistas en una filtración que provino desde la AFI y la Justicia.

La filtración de los documentos internos de la AFI fue noticia en varios medios, pero solo tres periodistas fueron denunciados. Los diputados de Cambiemos Fernando Iglesias, Waldo Wolff, Jorge Enríquez y Alvaro de Lamadrid denunciaron a la titular de la AFI Cristina Caamaño y a los fiscales de Lomas que subieron los documentos al sistema informático de la Justicia, pero dijeron que “corresponde analizar la responsabilidad” de los periodistas Ari Lijalad y Franco Mizrahi, por difundir información protegida por la ley de inteligencia en el sitio El Destape.

Recordemos que la filtración de los documentos expuso seis convenios internacionales secretos y los nombres de más de 2.000 espías y ex agentes, de los cuales 181 figuran incluso con su número de DNI.

Según los denunciantes, al comienzo de la cobertura periodística, el documento original no fue tachado y se expuso a muchos de esos espías. “El propio portal El Destape Web continuó publicando notas en las que se expusieron más datos secretos como nombres de agentes y personas jurídicas de cobertura”, dice la denuncia, que también incluye al director del mismo, Roberto Navarro.

La Ley Nacional de Inteligencia establece penas de hasta seis años de prisión para los que revelen secretos concernientes a la seguridad de la Nación, mientras que establece penas de hasta un año a los que “por imprudencia o negligencia dieren a conocer los secretos, de los que se hallare en posesión en virtud de su empleo u oficio”.

La filtración es parte de una guerra silenciosa para intentar voltear la causa de espionaje ilegal. Pero también hubo responsabilidades concretas de la gestión actual de la AFI y de los fiscales, que ya fueron convocados a varias comisiones del Congreso.

El Destape, donde suelen aparecer informaciones de la AFI de la gestión de Caamaño, respondió a través de una nota en la que sostiene que “la acusación es absolutamente falsa, malintencionada y ataca la libertad de expresión y el derecho a la información”.

“Los mismos que judicializaron la política ahora pretenden judicializar el periodismo.”, agrega. Y justifica la publicación de datos sensibles a un supuesto “interés público”.

“Es claro, además, que los diputados Wolff, Iglesias, De Lamadrid y Enríquez atentan contra la libertad de expresión de El Destape y contra el derecho a la información de nuestros lectores y que hay una animosidad ideológica en la denuncia.

En el caso del diputado Wolff hay un agravante: es el presidente de la Comisión de Libertad de Expresión e intenta censurar a un medio”, cierra esa misma nota que no lleva firma.