“Charly elevó la vara muy alta”

Charly García cumple este sábado 70 años. Nació un 23 de octubre de 1951, en el barrio de Caballito. En el mismo barrio que protagonizó aquel mítico Ferro de diciembre de 1982 pos guerra de Malvinas.

El año próximo se cumplirá medio siglo de su primer disco con Sui Generis: Vida, esas letras que cantamos todos en los fogones y que luego tomaron maestros de música de nuestros hijos para enseñar lindas melodías. Su música ha sido el inconsciente colectivo de varias generaciones

De niño sus padres lo dejaron con su abuela y tras un largo viaje, por Europa, vivenciaron su talento innato. El pequeño genio había aprendido de oído a tocar de oído la citarina para curar el “abandono”. Nunca más se despegaría de la música, este genio de oído absoluto, capaz de encontrarle una cuerda desafinada a Falú o de saber reconocer el registro de nota de las bocinas.

Subirse al viaje de repasar la obra de Charly es como entrar al Louvre y creer que con ver la Mona Lisa ya se entiende el todo. Las diferentes estaciones del músico son complejas, intensas y ricas en interpretaciones.

Por ese intento, Expediente Político convocó a un especialista como guía. El periodista Mariano Del Mazo escribió el libro Entre Lujurias y Represión, que cuenta la historia del considerado mejor grupo de rock nacional: Serú Girán.

“Charly siempre tuvo una ética artística formidable“, dice Mariano. Una anécdota lo pintó de cuerpo entero cuando había tenido una idea fuerza para representar el horror de la dictadura.

Pensó en hacer una intervención artística representando los vuelos de la muerte en un espectáculo de cara al río. Se lo contó a Hebe de Bonafini quien se opuso por considerar que iba a terminar siendo una banalización. “Tuvo mucha ética y no lo hizo”, recuerda el colega que tuvo esa información de primera mano.

Charly le dio a Del Mazo un titulazo en una entrevistas que le realizó : “Yo pude haber sido un desaparecido“, fue la frase destacada.

Los 70 de Charly tendrá un marco de homenajes organizados por Nación y el gobierno porteño, La Grieta también asoma latente en los festejos de tenerlo al eterno flaco esquivó militar por un color político pero siempre comprometió su arte para dar un mensaje , ya sea metafórico (Alicia en el País de las Maravillas) o directo (Botas Locas). Los militares golpistas nunca lo entendieron.

Por un lado, en el CCK, más de 100 artistas repasarán la carrera , como sus amigos Davis Lebón , Celeste Carballo, el Zorrito Von Quintiero , entre otros. Mientras que en paralelo, Fito Páez hará un recital en su honor enmarcado en el Teatro Colón.

La versión que hizo del himno nacional hoy se escucha en todas las escuelas. Charly siempre fue un adelantado.

Su prolífica carrera tuvo picos altísimos hasta los 90. Del Mazo lo define como “un músico quien elevó la vara mu alto“, con su formación clásica. En Desarma y Sangra se lo visibiliza en toques magistrales de Mozart y Bach.

Billy Bond cuando lo conoció adelantó la película : “Este nos va salvar a todos”, había dicho sobre el talento de Charly. Para Del Mazo es “nuestro Gardel de la segunda mitad del Siglo XX“.

Charly volvió a escuchar y relacionarse con la gente a partir de la recuperación que tuvo con la contención que le brindó el clan Ortega. Hoy camina lento pero su mente sigue craneando un nuevo disco cuyo título será La Lógica del Escorpión.

Los cinco imprescindibles de Charly para el entrevistado es como decidir entre los mejores goles de Messi. Con denodado esfuerzo salen: Canción de Alicia en el País, Los Dinosaurios, Desarma y Sangra, No soy un Extraño y Adela en el Carrusel.

Para seguir viendo en YouTube recomendamos el recital Ferro 1982 y el Quilmes Rock 2004.