Julián Domínguez todavía mastica bronca por la derrota en las PASO

El titular de la Cámara de Diputados está convencido que lo perjudicaron, para decirlo en términos más elegantes. Dice que no lo dejaron entrar al Correo Argentino hasta las 4 de la madrugada. Y adjudica semejante sapo al escándalo que se armó en torno de las declaraciones de Martín Lanatta,el condenado por el Triple Crimen que habló una semana antes de las PASO en el programa de Jorge Lanata. Aníbal Fernández lo acusó de estar detrás de esa movida. Las esquirlas, llamativamente, no llegaron al sciolismo, aunque la orden para entrar en la cárcel la dio Ricardo Casal, previa charla con Scioli. La bronca se concentró en Dominguez, que tuvo que ir a Olivos al día siguiente de las PASO, donde le ordenaron que se sacara una foto con Aníbal.

 

¿Por qué se comió semejante sapo? Quiere ser ministro de Scioli a partir de diciembre. Si sacaba los pies del plato, sus chances pueden caer. Hoy, Dominguez es número puesto para un ministerio de Industria. En las próximas semanas, según pudo saber ExpedientePolítico, trabajará para sumar al gabinete a Omar Perotti, que hizo una muy buena elección en Santa Fe.